Principios y declaraciones

Lo prometido es deuda...

“Principios y declaraciones” es el título del recien horneado disco de César de Centi y José Luis Paz, es su debut de masas, es su debut en formato pirateable... pero hace ya bastante tiempo que estos dos chavales enseñan sus retoños en muchos bares y garitos de A Coruña, y eso es algo que no se puede piratear... Ellos dicen que el título es “principios” porque es el primero, estan empezando y tal, y “declaraciones” porque quieren contar cosas, decirnos algo... bueno, eso que dicen es cierto pero yo no me creo que el título venga de ahí, me da la sensación de que es hecho a medias por dos músicos que cuentan cosas distintas del mismo modo: con dos cojones; uno que no puede “cesar” de hacer declaraciones y otro que continuamente muestra sus principios, sus pricipios de “paz” (¡cuán hortera soy!).

La placa comienza con “Declaración de principios”, escrita por César y musicada por José Luis, creo que está perfectamentamente elegida como primera canción, es un golpe certero en la frente del más incrédulo, los preciosistas arreglos de cuerdas me encantan y le dan toque distinto al resto del disco, además de Centi empieza llevandome la contraria y dice que él tambien tiene mucho que ver con que se llame “principios”... “lo imposible se consigue si se lucha”, luchemos pues.

El segundo tema se titula “Olga”, letra y música de César de Centi, una hermosa canciòn de amor de la que puede sentirse orgullosa la susodicha chica, escuchadla con calma, tiene frases lapidarias: “cuando la conocí yo tenía el corazón atravesado con un cuchillo”, la voz de Carlos Sampedro no hace sino conseguir un poco más el tema.

“Dame un respiro”, bajo mi punto de vista, nos enseña a un José Luis Paz en estado puro, guitarra, armónica y voz, sin arreglos, cantando en primera persona a lo que quiere y a lo que no quiere, tampoco pide mucho, más que nada dignidad y libertad, parece justo, ¿no creeis?.

“Silencio”, me encanta este tema, casi puedo decir que es el que más me gusta de César, melancolía pura, de esa melancolía que consigue hacerme un poco más feliz, es raro, pero a mi me pasa, “los damnificados del corazón al fondo, sin apelotonarse”... ¿qué más quereis que os diga?, que tiene un violín (Iván Novo) y un violoncello (Rosalía Vázquez) que suenan de vicio y que con este tema cualquiera puede hacerse llamar cantautor y más si los coros los hace un señor llamado Bau. Felicidades.

Lo que viene a continuación, es el hit de José Lúis Paz, “Veo veo”, puedo decir que lo escuché por primera vez en el concierto de cantautores del paraninfo de A Coruña, y que me quedé enganchado a esa canción, dicen por ahí, que suele pasar, doy fe de ello. Cuando la escuchais os dais cuenta de por que hablo de principios cuando nombro a este chico, no podía apellidarse de otro modo. La melodía es sencilla, directa, limpia, se deja escuchar desde la primera vez y consigue que una canción que habla de desgracias sea alegre y feliz.

“Llueve” es el tema seis del disco, en el que la composición de César toma una fuerza distinta a la original, con esa guitarra y ese cajón flamencos, no engañaría a nadie si dijese que me gusta más la original, pero he de reconocer que no soy muy flamenco, así que no cuenta demasiado mi opinión, se agradece el riesgo tomado y también es de aplaudir lo bien que toca Dani de Lito, si señor.

He oído comentarios muy buenos por ahí sobre esta canción, “Amor de biblioteca”, compuesta por José Luis Paz, tengo entendido que no podría haber existido sin la presencia de César de Centi, de hecho es la canción de José Luis que más se acerca a una de César... bueno, lo que quiero decir es que me encanta. Sólo hay piano, del maestro Taboada, y las voces perfectamente encajadas de los arriba nombrados, pero no se necesita nada más. La letra es redonda (aplausos), la melodía de voz engatusa al más pintado (más aplausos), y por si fuera poco David se encarga de marcar la pauta y de dar el énfasis correcto (ovación), poniendole así un lacito rojo a la canción, dispuesta para ser regalada a nuestros oidos.

Bueno a partir de ahora voy a intentar ir un poco más rápido en las siguientes canciones, por que me estoy tirando rollo bonito...

No sé muy bien el motivo pero me gusta especialmente este tema de César, creo que es la letra, esa historia tan bonita de “Faustino y Luisa”, me gusta como la cuenta, como la entona “y quiero llorar...”. “Una deuda pendiente” es la siguiente canción de José Luis Paz, es un tema bonito, tocado sin rasgueo alguno, como buen cantautor, me gusta pero no es de las que más del autor; eso mismo me pasa con “La tregua de tus labios”, muy en la linea César de Centi pero no consigue llegarme tanto como las anteriores. El siguiente tema se titula “Quien pudiera” y es de J.L. Paz en colaboración poética con Bau, me gusta mucho más que “Una deuda pendiente”, pero supongo que será para gustos, a mi me convencen los arreglos y el estribillo, pega fuerte.

Si “Veo veo” era el hit de José Luis, “Combatiendo tu olvido” es el de César, es una preciosa canción dedicada a una mujer, como muchas otras, pero con un sentimiento que, sin saber nada, un espectador se da cuenta de que es muy especial... “no se lo que tienen las canciones que cuando las escribes te cae alguna lágrima, pero son las que más gustan”, algo así dijo César, y cuanta razón tenía... además David Taboada no falla y da toda una lección de como se toca el piano cuando se trata de un amigo, es decir, con el sentimiento que merece la canción.

Pues “ya” llegamos al final del disco, “Érase una vez” es la última canción, escrita por Jose Luis Paz, antes hubo una canción que en la que César pedía su parte en los “principios”, pues en este tema José Luis requiere su porción de gloria en las “declaraciones”, bueno ya en canciones como “Quien pudiera” cantaba al amor, o mejor dicho, al desamor, pero es aquí donde se la dedica a una mujer y se deshace en elogios y bellas palabras hacia ella... es un tema pegadizo y que se deja escuchar desde la primera vez, podría ser una de esas canciones que un cantante famoso escoge para su próximo disco, podría ser... pero es demasiado personal como para andar prestándola por ahí, bien hecho.

Ahora sólo puedo deciros que aún quedaría una sorpresita al final pero eso ya lo encontrareis vosotros cuando escucheis el disco.

Finalmente la conclusión es buena, muy buena, un disco compartido y bien repartido, sin resaltar protagonismos, con preciosas melodías y letras que nos cuentran cosas interesantes, bellas, útopicas o terrenales, pero ante todo sinceras... hecho para escuchar en la soledad o en la pareja, en la cama o en la biblioteca, en los bares o en los parques. Solo se requiere comprar el cd (instantes de publicidad) a un módico precio ( http://www.principiosydeclaraciones.blogspot.com ) y tener un poco de buen gusto; os lo aconsejo, de corazón, porque de corazón también está hecho y merece mucho la pena descubrir a estos dos artistas, porque a veces nos empeñamos en buscar lejos lo que queremos cuando hay algo realmente bueno tocando a nuestra puerta. Por mi parte nada más, espero no haberme equivocado mucho en las canciones, que misculpen los autores, y hasta el próximo disco.